Suman mil 78 casos de gusano barrenador del ganado en el sureste mexicano

La plaga de gusano barrenador del ganado en los estados del sureste mexicano se ha multiplicado en los últimos meses. Desde noviembre de 2024 hasta este mes de mayo, el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria (Senasica) ha reportado mil 78 casos ante la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA).
El gusano barrenador del ganado es una larva que se alimenta de carne viva en animales de sangre caliente, incluso en humanos. Considerada también como una plaga exótica, es una enfermedad que ha generado tensiones entre México y Estados Unidos por el impacto que tiene en las cabezas de ganado.
Según datos del Análisis del Impacto Potencial del Gusano Barrenador en México, cuando México y Estados Unidos erradicaron el gusano barrenador del ganado entre 1960 y 1991, ambos países desembolsaron unos 955 millones, en precios del 2020.
Los casos, recopilados en el Tablero de monitoreo de focos de Gusano Barrenador del Ganado en México y Centroamérica, del atlas sanitario del senasica, han ido en aumento desde que nuestro país realizó un reporte de “Notificación Inmediata” ante la OMSA, a través del Sistema Mundial de Información Zoosanitaria (WAHIS, por su siglas en inglés), por el primer caso detectado de miasis por gusano barrenador en Chiapas, identificado el 23 de noviembre de 2024.
Ese mes se registraron dos casos, en diciembre de 2024 se sumó otro contagio, y en este año los casos se multiplicaron: 31 en enero, 69 en febrero, 471 en marzo, 503 en abril y uno en mayo.
Los estados con más casos de gusana barrenador del ganado son Chiapas y Tabasco, pero también hay presencia de esta plaga en Campeche, Quintana Roo y Yucatán.
Aunque la mayoría de los casos se han presentado en vacas o reses, 940 de los mil 78, el gusano barrenador también ha afectado a otros animales: 65 caballos, 31 cerdos, 21 perros, 17 borregos, tres cabras y un ave. Esto debido a que las larvas del gusano crecen en heridas por descorne, marcaje de ganado, entre otras.
De acuerdo con los mismos datos del Tablero de monitoreo de focos de Gusano Barrenador del Ganado en México y Centroamérica, además de los casos ya registrados, en nuestro país hay 48 mil 413 animales susceptibles a ser infestados por esta plaga.
Esta plaga comenzó a extenderse por Centroamérica a partir de 2022, cuando en países como Panamá se registraron 466 casos. Un año más tarde, la OMSA recibió el reporte de que en Panamá los casos eran siete mil 152 y en Costa Rica había 57 animales infestados. El año pasado la OMSA registró ocho mil 600 casos en Nicaragua, 625 en Honduras, siete en Costa Rica, tres en México, tres en Belice, un caso en Guatemala, y otro más en El Salvador.
Ante el avance el gusano por Centroamérica, y con la previsión de su inminente llegada al sureste mexicano, el Gobierno federal activó el Plan de emergencia para hacer frente a la presencia de gusano barrenador del ganado en el sur de México en donde se contemplan las acciones para hacer frente a la plaga.
Desde 2003 México era un país sin presencia del gusano barrenador del ganado, sin embargo, su reintroducción “impactaría negativamente al sector pecuario, provocando en los animales infecciones secundarias, escasa ganancia de peso, disminución de la producción de carne y leche, baja calidad de las pieles y ocasionalmente la muerte, por lo que es necesario contar con un plan de emergencia para que, en caso de presentarse, controlar rápidamente su propagación y erradicarlo nuevamente en el menor tiempo posible”, se lee en el plan.
El documento señala como la primera barrera de defensa a la Dirección General de Salud Animal (DGSA); como segunda barrera la vigilancia epidemiológica pasiva. Además la tercera barrera de defensa “se desplegará ante la entrada inminente del gusano barrenador del ganado o tras la confirmación del primer caso en México, lo que detonará la activación del Dispositivo Nacional de Emergencia de Sanidad Animal (DINESA)”.
Tras la reintroducción del gusano barrenador en México y el incremento de casos en los últimos meses, el domingo 11 de mayo el Departamento de Agricultura de Estados Unidos pausó por 15 días las exportaciones mexicanas de ganado.
Dos semanas antes, el 26 de abril, la secretaria de Agricultura de Estados Unidos, Brooke Rollins, envió una carta a su homólogo en México exigiendo que nuestro elimine las restricciones a las aeronaves del Departamento de Agricultura y exima de los aranceles aduaneros a los equipos de erradicación que están perjudicando gravemente la respuesta de Estados Unidos a la propagación del gusano barrenador.
El pasado martes 13 de mayo, el secretario de Agricultura, Julio Berdegué, señaló en la conferencia matutina presidencial que desde que se detectó el primer caso de gusano barrenador en noviembre, México ha hecho todo lo materialmente posible para eliminar la plaga.
Entre las estrategias que presentó el funcionario se incluye la dispersión aérea de moscas estériles para contrarrestar a las larvas del gusano barrenador. Esto se relaciona con las aeronaves mencionadas por Rollins en su carta dirigida a Berdegué.
Sólo en este año, el Senasica ha desembolsado 167.4 millones de pesos en dos contratos para adquirir mupas de mosca estéril del gusano barrenador y por servicios de dispersión aérea con la empresa Servicios Mubarqui S. de RL de C.V.
Fuente: El Sol de México