Treinta empacadoras de limón de Apatzingán permanecen cerradas por extorsiones

El 22 de febrero, la Asociación de Citricultores del Valle de Apatzingán A.C. anunció el cierre de sus oficinas en el municipio para proteger a su personal. Bernardo Bravo, presidente de la asociación, informó: “Amigos y amigas productores de limón, a través de este medio les informo que hemos recibido una serie de amenazas dentro del Tianguis Limonero en Apatzingán, por lo que hemos tomado la decisión de cerrar las oficinas de la administración la siguiente semana. Esto, en virtud de proteger y salvaguardar nuestra integridad y sobre todo nuestro bien principal que es la vida”. Desde entonces, las instalaciones están resguardadas por elementos de la Defensa.
Bravo expresó: “Pedimos sensibilidad por lo que los productores, empacadores e industriales de limón en Michoacán viven. No es justo que se señale al sector como responsable de no emitir denuncias, cuando los principales generadores de violencia en la región, cuentan con orden de aprehensión”.
El crimen organizado ha impactado al gremio en los últimos años, afectando la producción y distribución de limón. En los últimos meses, la violencia pasó de imponer cuotas al producto a realizar ataques y asesinatos, y ahora busca liderar el comercio a través de la asociación en la zona.
El 8 de febrero, el adolescente Pablo Ríos, de 15 años, murió tras la explosión de una mina expansiva en un plantío de limones en Santa Ana Amatlán. Posteriormente, el 20 de ese mes, cortadores de limón decidieron no acudir a la siembra tras detectar dos explosivos sobre la carretera que va de Loma de los Hoyos a Cenobio Moreno.
Fuente: lucesdelsiglo.com