Exportación de becerros mexicanos cae 60% por brote de gusano barrenador

El Grupo Consultor de Mercados Agrícolas (GCMA) reportó que, durante los primeros cuatro meses de 2025, la exportación de becerros en pie mexicanos registró una caída del 60% en comparación con el mismo periodo del año anterior. La reducción se atribuye al brote de Gusano Barrenador del Ganado (GBG) y a las disrupciones sanitarias que ha provocado en el país.
Según cifras preliminares de la Agencia Nacional de Aduanas de México, entre enero y abril se exportaron 202,000 cabezas de ganado, frente a las 504,000 del mismo periodo en 2024.
Estados Unidos sigue como principal destino pese al cierre parcial
Aunque Estados Unidos mantiene cerrada su frontera sur a los envíos de ganado en pie por riesgo sanitario, aún se posicionó como el principal comprador, al adquirir 75,488 cabezas, equivalentes al 40% del total. Le siguieron Japón, Canadá y Hong Kong como principales destinos.
En términos de valor, estas exportaciones representaron 245 millones de dólares, una caída interanual del 48% frente a los 474 millones de dólares registrados en 2024.
Precios en niveles récord, pero escasez limita operaciones
El director del GCMA, Juan Carlos Anaya, señaló que, a pesar de la caída en volumen, el precio por cabeza se mantiene en niveles históricos, con un promedio de 1,200 dólares, lo que representa un aumento del 30% respecto al año anterior.
Explicó que tanto México como Estados Unidos enfrentan una escasez de bovinos. En el caso estadounidense, el hato ganadero se encuentra en su nivel más bajo desde 1951, lo que ha impulsado un incremento del 30% en las compras de animales vivos en los últimos meses.
Por el contrario, en México, la baja disponibilidad de becerros responde a dos años de sequía —principalmente en estados del norte— y a los efectos del GBG en entidades del sur. Como consecuencia, las engordas nacionales operan al 72% de su capacidad.
Pérdidas por GBG superan los 6,600 millones de pesos
Según datos del Consejo Mexicano de la Carne (Comecarne), desde la detección del primer caso de gusano barrenador en un bovino en Chiapas, en 2024, las disrupciones en las exportaciones han generado pérdidas estimadas en 6,699 millones de pesos.
Aunque México ha colaborado con autoridades de Centroamérica y Estados Unidos para contener la plaga, factores como el tránsito humano, el tráfico ilegal de animales y la movilidad no controlada han dificultado los esfuerzos de contención.
Actualmente, el comercio de bovinos en pie con EE. UU. continúa restringido, lo que ha llevado a los ganaderos exportadores de entidades fronterizas a solicitar al Gobierno Federal la implementación de acciones sanitarias urgentes, así como el cierre de la frontera sur para proteger la sanidad del hato nacional.
Fuente: Ganadería.com