El Programa de Estimulación de Lluvias en el ciclo verano 2023 implementado por el Gobierno Federal dejó de funcionar hace 20 días en el estado de Chihuahua, a pesar de que arrancó con “bombos y platillos” el pasado 3 de agosto.
El plan fue implementado por la Comisión Nacional de Zonas Áridas (Conaza), en colaboración con la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), Secretaría de Desarrollo Rural (Sader), y el apoyo de una aeronave de la Fuerza Aérea Mexicana (FAM). De acuerdo con información proporcionada por la Conaza, a través de la delegación del Bienestar, del 3 al 11 de agosto sólo hicieron tres vuelos en el polígono original trazado, y cuya superficie abarca 2 millones de hectáreas.
Hasta ayer, el avión destinado para este fin, un King Air 350i con número de matrícula 5210, se encontraba en la ciudad de Torreón, Coahuila, sin una fecha programada de regreso a la entidad, aun cuando el ciclo de lluvias está a punto de concluir en la primera quincena del mes de septiembre.
El pasado 11 de agosto se registró el último de los vuelos de estimulación de lluvias que hizo el personal de Conaza con ingenieros especializados, en el que hicieron el asperjado de 100 litros de reactivo de yoduro de plata.
Los municipios que abarcaron en ese último vuelo fueron: Matamoros, Santa Bárbara, San Francisco del Oro, Huejotitán, El Tule, Balleza, Nonoava, Satevó, San Francisco de Borja, Carichí, Cusihuiriachi y Guerrero, según la ficha técnica del reporte de vuelo al que tuvo acceso este medio de comunicación.
Cabe mencionar que en la rueda de prensa en que se anunció este programa “con bombo y platillo” , el pasado 3 de agosto en las oficinas de la Secretaría de Desarrollo Rural de esta capital, y con la presencia de representantes de todas las dependencias involucradas, se precisó a la ciudadanía que iban a ser un total de 20 los vuelos a realizarse en el presente ciclo de lluvias.
El polígono que se iba a va cubrir era de 315 kilómetros de largo por 63.5 kilómetros de ancho.
En dicho anuncio incluso estuvo presente el director general de la Conaza,. Ramón Sandoval –quien vino de la Ciudad de México-, el delegado de programas federales Juan Carlos Loera, y demás funcionarios, quienes destacaron que estas acciones de bombardeo de nubes provocan el aumento de un 25 por ciento las lluvias.
Se informó que hay 88 países que hacen estimulación de lluvias, entre ellos México.
Entre los puntos que resaltaban los funcionarios federales era que buscarían, con las precipitaciones pluviales, recuperar la captación de agua para las presas en la entidad.
La delegación del Bienestar a través del departamento de comunicación social respondió ayer a esta Casa Editora que el avión “King Air” se mantenía en la ciudad de Torreón, Coahuila donde era utilizado para el mismo fin.
Ante el cuestionamiento de los 20 días que han transcurrido sin utilización de la aeronave en la entidad, la respuesta textual fue, “El avión es compartido, en su momento tanto el titular de Conaza como el delegado hicieron en varias ocasiones una petición a la gobernadora en apoyar con la renta de una aeronave para el bombardeo y nunca aceptó, incluso llegó a contestar que no era necesario y no estaba comprobada la eficacia de los bombardeos”.
Este medio de comunicación contactó ayer al secretario de Desarrollo Rural de Gobierno del Estado, Mauro Parada, quien respondió que no les han informado el estatus de manera oficial por parte de la Conaza.
Fuente: El Diario
