Cierre de fronteras por gusano barrenador genera pérdidas de 12 mdd semanales en la región sur
El cierre de fronteras para la exportación ganadera ha generado pérdidas significativas en el estado de Chihuahua, afectando principalmente a los productores y exportadores de la región. Fidencio Loya, gerente de la Asociación Ganadera señaló que el impacto económico alcanza los 40 millones de dólares por semana en el estado, de los cuales el 30% corresponde a la región sur, equivalente a 12 millones de dólares semanales.
Según Loya, aunque el protocolo para la reapertura está siendo definido por las autoridades mexicanas y estadounidenses, el proceso podría tardar semanas. Mientras tanto, los productores enfrentan dificultades con la liquidez, ya que no pueden vender becerros y se ven obligados a comercializar vacas destinadas a la producción. “Esto afecta tanto a corto como a largo plazo, especialmente en una temporada de gastos altos como diciembre”, señaló.
Además, los ganaderos han tenido que incurrir en gastos extraordinarios para mantener a los animales listos para la exportación. Entre estos costos adicionales destacan el transporte de los becerros que tuvieron que regresar, la alimentación prolongada y los cuidados médicos, ya que los cambios de temperatura han provocado enfermedades respiratorias, incluyendo neumonías.
Otro factor que agrava la situación es la vigencia de las pruebas de tuberculosis que exigen las autoridades norteamericanas. “Estas pruebas tienen un tiempo limitado de validez, y si se vencen, los productores tendrán que repetirlas, lo que implica más gastos”, explicó el gerente.
Loya insiste en que la situación aún no es crítica, pero podría complicarse si el cierre de fronteras se prolonga. “Estamos en pausa, pero cada semana que pasa aumenta el impacto económico y logístico. La acumulación de ganado hará más complicado retomar las exportaciones cuando se reabra la frontera”, comentó.
El gerente también subrayó que el retraso afecta no solo a los exportadores, sino también a los compradores norteamericanos, quienes necesitan el ganado para sus engordas. Sin embargo, confía en que el mercado se estabilizará una vez que se resuelva el problema y se implementen los nuevos protocolos.
Finalmente, Loya hizo un llamado a la calma y recomendó no especular sobre las fechas de reapertura de las fronteras. “Las únicas noticias oficiales provendrán de la Unión Ganadera Regional de Chihuahua, la Sader y las autoridades sanitarias de Norteamérica”, puntualizó.
La situación sigue en desarrollo, mientras los ganaderos esperan una pronta resolución que permita mitigar las pérdidas económicas y restablecer la estabilidad en el sector, con la exportación normal que tenían antes del cierre de las fronteras, ya que ello les ha venido afectando.
Nota: El Sol de Parral