Aprendices: Oportunidad para las comunidades

Coeur Mexicana considera importante fortalecer sus lazos con las comunidades que están cercanas al complejo de Mina Palmarejo.

Acercarse en forma permanente con las personas ha sido una política que permite identificar necesidades de desarrollo humano y profesional, a fin de emprender acciones que fomenten mejoras en la calidad de vida de quienes conforman a las comunidades asentadas en los municipios de la región.

Encontrar un empleo es una necesidad de los pobladores que motivó la implementación del programa Aprendices, el cual ofrece oportunidad de trabajo, capacitación y remuneración a quienes habitan alrededor del complejo.

César Alejandro Palafox Cruz, originario del municipio de Chínipas, es uno de los aprendices que, gracias a su esfuerzo, dedicación y compromiso con la empresa, en la actualidad, trabaja como operador de bulonadora.

¿Cómo fue tu proceso para poder trabajar en Mina Palmarejo?
“Empecé a través del programa. Estuve seis meses como aprendiz y otros tres meses más a prueba, antes de ser contratado como operador de bulonadora haces más de tres años”.

¿Cómo te enteraste de Aprendices”?
“En mi pueblo toda la gente quiere trabajar aquí en la Mina Palmarejo. Pusieron volantes en las tiendas para anunciar el Programa de Aprendices y tome la decisión de postularme. Llevé mi solicitud al Departamento de Relaciones Comunitarias y fue así como logré entrar a trabajar”.

¿Cuándo empezaste, qué idea tenías sobre la minería?
“Es muy diferente la idea que yo traía. Soy operador de máquinas y al principio pensaba que iba a manejar maquinaria, pero, en realidad, todas son muy diferentes. Fue una experiencia distinta a lo que imaginaba”.

¿Qué aprendiste?
“Primero realice trabajos livianos para aprender a conocer las actividades que se hacen en la mina. Ver viera primero en que consiste la producción, cómo se trabajaba y aprender de los demás. Después de un tiempo me pusieron a trabajar poco a poco, me iban enseñando, pero no me pusieron a trabajar de inmediato sino hasta que estuviera bien capacitado”.

¿Fue así como te interesó manejar la bulonadora?
“Una vez pasado este proceso, me pusieron como ayudante de bulonadora y luego como operador. Duré un par de años aprendiendo antes de que me soltarán la bulonadora”.

¿Qué piensas de tu trabajo?
“Hay muy buen ambiente laboral. Sin importar que convivimos personas de muchos lados, hay mucha hermandad. La mayoría viene de fuera y todos se tratan bien. A mí me gusta mucho porque todos los días vivo algo diferente. Es un reto porque hay peligro y siempre andas con la emoción alta, pero atento al trabajo”.

¿Cómo manejas los temas de seguridad personal?
“En este tema nos preparan muy bien, nos enseñan muchos temas de seguridad como ser parte de una cuadrilla de rescate, para lo cual debemos aprender sobre la maquinaria, el trabajo y cuidarse uno mismo”.

¿Puedes contar una anécdota sobre la capacitación de seguridad personal?
“Un día estaba trabajando en una obra y se empezó a derrumbar, sin embargo, gracias a las capacitaciones que nos dieron supe por cual lado tenía que evacuar y sobre todo anticipar cuando ocurriría ese pequeño derrumbe”.

¿Qué les dirías a las personas sobre el programa Aprendices?
“Está muy padre porque te enseñan muchas cosas útiles. A trabajar, a trabajar con seguridad y aprender primeros auxilios si quieres entrar a la cuadrilla rescate. Esa parte de mi trabajo me gusta mucho porque ayudo a los compañeros o puedo aplicarlo en casa si pasa algún accidente, confiado en que puedo utilizar los conocimientos para actuar frente a una emergencia”.

¿Invitas a otros a trabajar?
“El trabajo está bien padre la verdad. Yo si recomiendo participar en el programa. Hay que tener mucha responsabilidad porque por la empresa ocupa gente comprometida. Si faltas un día, dejas un compañero sin tu apoyo y no puede operar una máquina solo. Por ese motivo es importante tener bien puesta la camiseta”.